LUNA ROJA, de Nieves Herrero. Puntuación: 3/5
Había leído antes dos novelas de la periodista Nieves Herrero, ‘Lo que escondían sus ojos’, sobre la vida de Sonsoles de Icaza, marquesa de Llanzol y su relación con Serrano Suñer, y ‘Esos días azules’, sobre la vida de Guiomar, la musa de Antonio Machado. La primera me encantó y pronto fue adaptada con éxito a serie televisa; pero la segunda se me hizo muy pesada.
Acabo de terminar su última
novela ‘Luna roja’ en la que la autora cambia completamente de registro. Ella
suele escribir sobre personajes históricos (sobre Ava Gadner y Luis Miguel
Dominguín, en ‘Como si no hubiera un
mañana’; sobre la reina Victoria Eugenio en ‘El joyero de la reina’; sobre Carmen, la hija de Franco, en ‘Carmen’; y sobre Carmen Cervera, baronesa Thysen, en ‘La baronesa’). Sin embargo, con su
nueva novela inaugura una saga dedicada a la inspectora Margot Sanz Peters, una
joven de 24 años, residente en Londres con sus tíos, el diplomático español
Julián Martín-Britz y su mujer Frances Peters, que la recogieron a la muerte de
sus padres en un accidente de coche.
En realidad, Nieves Herrero
está haciendo un homenaje a Margarita Landi, una de las primeras mujeres que se
especializó en el género periodístico de sucesos, tradicionalmente reservado a
los hombres, y que se incorporó al diario El
caso en 1953, permaneciendo en él durante 27 años.
Precisamente la historia
arranca en la Navidad de 1953 en la embajada española en Londres, última que
Margot pasará allí pues a comienzos del año nuevo volverá a España como
redactora de Siluetas, una revista de
moda y eventos de la sociedad madrileña.
A los pocos días de su
estancia en la capital se produce el robo de un valioso collar de perlas y
diamantes. Y Margot, apasionada de Sherlock Holmes desde su infancia, consigue
introducirse de la mano de Harry Parker, el jefe de seguridad de la embajada en
Londres, en la Brigada de Investigación Criminal de Madrid.
A las órdenes de Benito
Poveda, el comisario jefe jubilado de la brigada, aprenderá el oficio de
policía, al tiempo que colabora con la revista y con el periódico de la época El caso.
Una vez hecho el
planteamiento de la novela, la autora dedica el resto a un asesino en serie de
altas damas de la sociedad madrileña: Genoveva Font, marquesa de Torquemada;
Casilda de los Llanos, la hija soltera de los condes de Romelinos; María del Carmen
Jerez del Castillo, hija única del conde de Motesquinza; y María Benavente,
hija de los duques de Mesena.
Junto a estos personajes de
ficción, la autora introduce también personajes reales de la época, como
Cayetana Fitz-James o Aline Griffith, futura condesa de Romanones.
Por último, deciros que,
como indica el título de la novela, en sus más de 500 páginas, hay constantes
referencias a la luna y a sus fases, como superstición que da lugar a los
asesinatos en serie.
En definitiva, un thriller
entretenido, pero con una escritura muy sencilla, al estilo de la autora, que
pasa sin pena ni gloria, pero que sirve para echar un buen rato ya que aúna intriga,
con ciertas dosis de amor y de novela histórica y estos siempre son buenos
ingredientes en cualquier trama.
Gracias por mostrarnos interesantes libros.
ResponderEliminarA ti por tus comentarios
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