LA VIDA QUE NOS SEPARA, de Chufo Llorens Puntación: 4/5

Cuando reseñaba ‘El destino de los héroes’, del escritor de novela histórica Chufo Llorens, os decía que es un autor por el que siento admiración pues sus novelas están muy bien trabajadas, escritas y documentadas, y eso que actualmente tiene 93 años. Por esa razón tarda varios años en publicar cada uno de sus libros y su producción no es excesivamente extensa. Yo he leído todas sus novelas, las cuales os recomiendo sin ninguna duda, siendo quizás mi preferida ‘La saga de los malditos’ en la que hace un paralelismo entre la expulsión de los judíos en la Edad Media y el holocausto nazi.

Los Reyes Magos me regalaron su última novela, ‘La vida que nos separa’, que he podido leer estas vacaciones. No es quizás la mejor de su trayectoria, pero se lee con gusto y tiene el mérito de haber sido escrita a su edad y tener más de 600 páginas.

Estamos ante una novela estructurada en dos partes más un epílogo, de las cuales la primera está narrada a través de dos líneas temporales. La historia comienza en 1977, cuando Mariana Casanova, con 32 años y cuatro hijos –Valentina, Alvaro, Rebeca y Diego- y tras once años de matrimonio con Sergio Lozano, descubre que su marido está en la ruina porque debe noventa millones de pesetas consecuencia de un desfalco. Por ello, acuciado por las deudas debe abandonar a su familia y huir a Méjico.

La segunda línea temporal se retrotrae a la década de los 60 y desgrana la juventud de Mariana. Su amor primero por Enrique Orellana, el hermano de su mejor amiga Gloria y, más tarde, por el rejoneador Rafael Cañamero, separado y mucho mayor que ella, por lo que sus padres la envían a Roma un año a estudiar. A su regreso conocerá a Sergio con el que se casa en 1966.

En la segunda parte, que comienza en 1979, Mariana decide trasladarse con sus hijos a Méjico para reunirse con su marido con la intención de salvar su matrimonio, aunque este se deteriora día a día. También en esta parte aparecen sus amores del pasado Enrique y Rafael.

Hay que entender que la historia se desarrolla en los últimos años del franquismo y el autor refleja muy bien la posición de la mujer en esa sociedad, porque Mariana pertenece a una clase acomodada y ha sido educada en los valores morales tradicionales de la época en los que el matrimonio debía ser para toda la vida y la principal obligación de la mujer es el cuidado de su marido y de los hijos.

Pero con el paso de los años las cosas empiezan lentamente a cambiar y Mariana, que es una mujer luchadora y decidida, a pesar de que pasa los días debatiéndose entre el deber y la realidad, termina echando a Sergio de casa.

Junto a estos dos personajes principales, hay otros también secundarios: Gloria y Malena, amigas de Mariana; Lupe, la amante de Sergio; Clara, la vecina; y Petra, la niñera y sirvienta.

Poco más puedo añadir en esta reseña, cuyo final se espera pero dejar buen sabor de boca. Tan solo que es un lujo poder seguir teniendo entre las manos nuevas novelas de este magnífico escritor y ojalá disfrutemos pronto de la siguiente.